¿Saben aquel que diu que entra un paisano en una cafetería y pregunta al camarero, con una voz que no le llega al cuello de la camisa?:
- ¿Qué me podría servir un café, por favor?
El camarero, con un vozarrón que se oye en medio barrio, tú:
- ¡¿Solo?!
- Diu, vale, que sean dos.
(Mil perdones, Eugenio)
Hoy, famosos y famosillos de toda índole y condición y público en general llevan a gala declararse tímidos -desde Angelina Jolie hasta Lady Gaga-, tal vez porque piensan que la timidez les confiere una aureola de sensibilidad. Pues tienen razón, oiga.
Resulta que científicos de la Stony Brook University de Nueva York, de la Universidad del Sudeste y de la Academia China de Ciencias han tenido la humorada de estudiar ese achaque de la personalidad llamado timidez. Durante una de las investigaciones, seleccionaron 16 personas a las que pidieron que examinaran los detalles de dos retratos similares, al tiempo que analizaban su cerebro a través de una Resonancia Magnética Funcional (¿?). «Los introvertidos estuvieron más tiempo observando las imágenes y mostraron una actividad elevada en las áreas cerebrales que se ocupan de asociar percepciones visuales y sensoriales. En definitiva, su cerebro no sólo elaboró la percepción visual, sino que se activó para una elaboración más profunda de la información», concluyeron los científicos.
Las áreas del cerebro que se activan en los tímidos están relacionadas con la valoración de estímulos socialmente relevantes: la amígdala, la corteza, el prefrontal medial e insular y el estriado ventral (¿?). La causa es la sensibilidad que muestran hacia los estímulos sociales negativos o nuevos, que son considerados como amenazantes. Y es que la angustia de los tímidos provoca que tengan una mayor sensibilidad para evitar situaciones sociales embarazosas. Esta alerta constante hace de cualquier interacción una experiencia más intensa debido a que analizan con más profundidad la información que reciben. En breves palabras, sus mecanismos cerebrales emplean más tiempo en la toma de decisiones, lo que les hace más predispuestos a la reflexión y a la creatividad. (Información extraída de algún sitio)Así que un respeto para los tímidos, por favor, porque además sabemos meternos en charcos y salir de ellos con una habilidad que ya quisiera para sí el más 'echao p'alante'. Si lo sabré yo...
